Las disputas territoriales y la guerra por el control de economías ilícitas entre las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC) y el ELN, en el Bajo Atrato (Chocó), han derivado en afectaciones directas a la población. Comunidades aledañas a los ríos Truandó y Salaquí han sido desplazadas y sus líderes sociales asesinados.
Por: Nicolás Achury González / @nicolasachury Pavas, un pueblo fantasma Las lágrimas no se pueden contener. Resulta estremecedor tan solo recordar esas noches en que la tranquilidad se rompía con…