Presidente de Colombia, Gustavo Petro
En medio de la crisis humanitaria y climática en el departamento de Chocó, el padre Albeiro Parra pide llegar a un cese de carácter humanitario multilateral.
El presidente de la República de Colombia, Gustavo Petro, llamó al Ejército de Liberación Nacional (ELN) a levantar el paro armado que lleva la organización insurgente en el departamento del Chocó desde el 9 de noviembre de 2024.
«Amor eficaz es levantar paros armados ante la crisis humanitaria de la gente en el Chocó», lo revolucionario es el amor y la solidaridad», dijo el mandatario en la red social X.
Asimismo, el equipo negociador del Gobierno pidió al ELN que se «levante cualquier acción de confinamiento y de limitación a la libre movilización de la población, y que permita que la ayuda estatal llegue al territorio».
El paro armado indefinido lo anunció el Frente de Guerra Occidental Ogli Padilla del ELN en los ríos de San Juan, Sipí y Cajón del departamento de Chocó, según la organización insurgente, como respuesta a las presuntas agresiones de la Armada Nacional, que han intensificado sus operaciones en el área en connivencia con el grupo narco paramilitar Clan del Golfo.
Los chocoanos no solo sufren la crisis climática que los tiene inundados, sino la crisis humanitaria que lleva décadas por el abandono estatal de quienes trabajan de la mano del grupo criminal Clan del Golfo y sus diferentes denominaciones.
Este paro armado se da luego de que las delegaciones del Gobierno y el ELN anunciaran el reinicio de las actividades en la mesa de diálogos de paz mediante el comunicado número 29 y tendrá un próximo encuentro del 19 al 25 de noviembre para avanzar al máximo en los temas acordados en los diferentes ciclos de paz.
Afectados y posible solución
Al menos 45.000 personas están afectadas por el conflicto armado en el Chocó en los sectores mencionados que perjudican a 85 comunidades afros e indígenas; 7.500 están afectadas por las inundaciones.
«El hecho no solo vulnerará su libre locomoción, sino que pondrá en riesgo su derecho a la salud y la vida». La situación incrementará la difícil realidad de los pobladores que sufren la violencia y la falta de acceso a servicios básicos», indicó la Defensoría del Pueblo en la región.
El padre Albeiro Parra rechaza el paro armado por parte del ELN no solo por poner en riesgo la vida de la población chocuana, sino porque ellos saben que en estas épocas de lluvia las comunidades necesitan ser atendidas en estas emergencias.
Parra señala la importancia de que se llegue de manera urgente a un acuerdo humanitario y un cese al fuego multilateral.»No estamos ganando nada con un cese bilateral o unilateral; necesitamos que sea un cese de carácter humanitario, que además de lo militar, también se hagan compromisos para no adelantar acciones que afecten a la comunidad», añadió.